En la última década, el comercio electrónico ha experimentado un crecimiento sin precedentes. Hoy en día, podemos adquirir productos de cualquier parte del mundo con un solo clic, comparar precios fácilmente y recibir los artículos directamente en casa en cuestión de horas o días. Esta comodidad ha impulsado que millones de personas compren online de forma habitual.
Sin embargo, este auge también ha atraído a ciberdelincuentes que ven en las compras online una oportunidad perfecta para estafar, suplantar identidades o robar información financiera. Sitios falsos, ofertas imposibles, suplantaciones de tiendas conocidas y métodos de pago poco fiables son algunas de las amenazas más comunes. Por ello, conocer cómo protegerse se ha convertido en una habilidad digital imprescindible.
A continuación, te presentamos una guía con recomendaciones. En ella encontrarás los pasos clave para reducir riesgos y comprar online con total tranquilidad.
- Compra solo en sitios con conexión segura (HTTPS).
- Elige tiendas conocidas o con buena reputación.
- Verifica la existencia de datos de contacto reales.
- Evita usar redes Wi-Fi públicas para comprar.
- Usa métodos de pago seguros.
- Desconfía de precios excesivamente bajos.
En conclusión comprar en Internet es seguro sabiendo protegerse. El comercio electrónico es una herramienta poderosa y conveniente, pero como cualquier entorno digital, requiere tomar ciertas precauciones. La seguridad no depende únicamente de las tiendas online, sino también de los hábitos que adopta cada usuario.